Tomás Pumarino

Tomás Pumarino (22), estudiante de Ingeniería Comercial de la Universidad de Desarrollo, es uno de los creadores de Reco Boards, una emprendimiento innovador que busca causar un impacto positivo en el medio ambiente a través de la creación de productos para deportes extremos con materiales como envases de cartón de alimentos y bebidas, para así darle una vida más útil a estos desechos masivos encontrados en las playas.
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Source: tomás pumarino

Tomás recuerda que desde niño siempre se había sentido muy conectado con la naturaleza y el mar. Su familia tenía la misma conexión y juntos hacían actividades como plantar árboles y acampar. Con su hermano mayor pasaban mucho tiempo surfeando y haciendo deportes al aire libre, por lo que notaron la cantidad de basura que hay en las playas, tanto en la arena como en el mar. Así surgió en ellos una gran preocupación por el medio ambiente, a la que años más tarde tratarían de encontrar una solución.

La idea de Reco Boards nació de su hermano mayor Lucas, surfista y terapeuta ocupacional, quien comenzó reciclando una vieja tabla de handboard de madera. Luego empezó a hacer tablas con placas recicladas de envases de cartón de alimentos y bebidas, hasta que en 2017 decidió irse a vivir a la emblemática ciudad costera de Quintero, una localidad devastada por la contaminación. Fue allí donde consolidó su idea. “Lucas vio este puente entre lo sustentable y los deportes extremos. Vio la oportunidad de darle un giro a la industria principalmente del surf en Chile”.

Reco Boards sustituye productos convencionales de deportes extremos como son las tablas de surf, snowboards, handboards, entre otros, por unos más sustentables hechos a base de materiales reciclados como tetrapack, yute, plásticos, entre otros, que consiguen con proveedores de reciclaje. Con esto buscan ser un ejemplo y promover la sustentabilidad tanto en el surf como en la sociedad en general. “Queremos causar un impacto de una manera más entretenida”.

En 2019 Tomás decidió unirse al proyecto para escalar la iniciativa y convertirse en un equipo. Fue así como en ese mismo año, en su universidad se desarrolló el programa Incuba UDD que busca potenciar emprendimientos de alumnos y se sumaron con su iniciativa. “Fue de a poco que nos empezamos a dar cuenta de que el proyecto tenía mucho potencial y que, a parte, también teníamos una gran pasión por esta”. Ese mismo año ganaron el Red Bull Amaphiko Country Fellow impulsado por Socialab, gracias a esto viajaron a Inglaterra donde presentaron su proyecto en la Academia de Red Bull y también pudieron acceder a talleres, charlas y mentorías.

Luego, en 2020, ganaron como emprendimiento social en la Universidad del Desarrollo, lo que les permitió asistir en junio a un campeonato global de emprendimientos universitarios de innovación social en la Universidad de San Diego en Estados Unidos, donde llegaron hasta la semifinal.

Actualmente son cuatro personas en el equipo y están en un periodo de recuperación tras el gran impacto de la pandemia, que los mantuvo suspendidos por un tiempo. Hoy se encuentran trabajando en el taller para lanzar nuevos productos como un balance board, handboard y un rack. Además, están en busca de financiamiento y esperan poder vender directamente en diversas tiendas, para así poder crecer y generar un mayor impacto.

Para Tomás es importante que más gente adquiera conciencia de la contaminación y la destrucción del medio ambiente. Su consejo para todos los jóvenes que buscan ser agentes de cambio como él es: “deja el planeta mejor de como lo encontraste. Cuando uno mira el mundo, tiene que replantearse las cosas, identificar los problemas y después buscar soluciones”.